jueves, 2 de abril de 2020

Mientras estamos confinados por el COVID19 la Comisión Europea y el Gobierno español apuntalan los megaproyectos de interconexión eléctrica


Dada la situación de alerta sanitaria por el COVID19 en la que nos encontramos desde hace ya más de dos semanas, no nos había parecido necesario advertir de que, lógicamente, nuestras asambleas y otras posibles acciones quedaban pospuestas hasta el final del confinamiento. No obstante, aprovechamos que mañana 3 de abril era la fecha que se había propuesto para nuestra asamblea mensual para confirmaros lo obvio (que la asamblea queda pospuesta hasta nuevo aviso), pero también para recordaros que seguimos activos, en la medida de nuestras posibilidades, a través de nuestro grupo de Google y de nuestro grupo de Facebook y que estamos valorando la posibilidad de organizar nuestras asambleas (u otras reuniones o acciones) mediante videoconferencia o medios digitales.
También queremos aprovechar para mostrar nuestra indignación al comprobar que, pese a la grave situación de crisis (no solo sanitaria, sino también social) en la que nos encontramos, la Comisión Europea, la misma que parece no tener intención de rescatar a la ciudadanía, como ya hizo en la crisis del 2008, no ha perdido el tiempo a la hora de liberar nada más y nada menos que 980 millones de euros (mediante el Mecanismo «Conectar Europa» —CEF—) para financiar megaproyectos de interconexión como los que destrozarían el Pirineo navarro y aragonés o el Golfo de Vizcaya. Podéis verlo en: https://ec.europa.eu/info/news/energy-union-eu980-million-eu-funding-available-clean-energy-infrastructure-2020-mar-13_en

Proyectos de interconexión eléctrica entre España y Francia. Haced clic en la imagen para ampliarla.

Pero la noticia, que, sin duda, es el correlato de la que os comunicábamos sobre la aprobación de la lista de los PIC en nuestro anterior post, nos causa honda consternación no solo por el terrible contraste al que hemos aludido, sino también porque es toda una apoteosis del Greenwhasing (la mentira verde) al calificar la CE a estos megaproyectos que tan generosamente pretende financiar con dinero público como infraestructuras de energía limpia, ignorando, como si nada, las evidencias de que tales megaproyectos son contrarios a una transición ecológica socialmente justa y van a servir para apuntalar la energía nuclear francesa y la compra de energía sucia de origen fósil fuera de las fronteras de la UE (y por tanto sin pagar las tasas de emisión de gases de efecto invernadero) (véase al respecto: http://autopistaelectricano.blogspot.com/2020/01/presentacion-de-la-red-de-apoyo-mutuo.html). La concatenación de noticias de estos últimos meses: (13 de febrero) "La derecha, los socialistas y los liberales rechazan en el Parlamento Europeo la objección a la lista de proyectos de interés comunitario que habían presentado los Verdes y la Izquierda Unitaria: avalan así una lista que incluye proyectos de combustibles fósiles y subvenciona indirectamente al fracking estadounidense"; (11 de marzo) Publicación de la lista de los PIC, y casi de inmediato (13 de marzo), la noticia de la que hoy os informamos, esto es, la liberación de 980 millones de euros para subvencionar interconexiones eléctricas, parece mostrar una huida hacia adelante de la CE a las puertas de la crisis que ya se nos ha venido encima con la única finalidad de apuntalar a toda costa unos megaproyectos energéticos inútiles e impuestos que cada vez más parecen haber sido concebidos como una especie de rescate a las grandes corporaciones energéticas. Y por si alguno piensa que nos estamos excediendo en nuestro análisis, le sugerimos que recuerde lo que ya ha sucedido con la primera de las macrosubvenciones concedidas a este tipo de proyectos, los 578 millones de euros otorgados al proyecto de interconexión eléctrica a través del Golfo de Vizcaya, que deberían haber sido devueltos al no existir ya la justificación de carácter técnico que se invocó al concederlos. Y todo ello sin olvidar que la CNMC pilló in fraganti a Red Eléctrica de España tratando de colarnos a los consumidores la parte que le tocaba de esta macrosubvención como si fuera una inversión propia (véase: http://autopistaelectricano.blogspot.com/2019/06/la-desverguenza-de-red-electrica-de.html).
Pero no acaba aquí la cosa: también el Gobierno español parece estar aprovechando para apuntalar el lucrativo futuro del oligopolio como demuestra la noticia que conocíamos ayer por un comunicado de prensa de Greenpeace, en el que esta organización denunciaba que el Gobierno remitió el 31 de marzo el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) a la CE, aprobando definitivamente el plan sin esperar a agotar todas las fases del procedimiento, y, en particular, saltándose los plazos de participación pública de su evaluación ambiental estratégica. Al respecto, hay que recordar que el plazo para la presentación de alegaciones a este procedimiento de evaluación ambiental estratégica finalizaba en principio el 25 de marzo, pero en virtud del propio RD 463/2020, de 14 de marzo, por el que se decretaba el estado de alarma, tal plazo había quedado suspendido, como todos los plazos administrativos, a partir del 15 de marzo.
De hecho, esta noticia nos ha pillado, precisamente, tratando de personalizar (como os habíamos prometido) las muy acertadas alegaciones que había elaborado ya con gran esfuerzo la Plataforma por una Transición Ecológica Justa (que compartimos en nuestro grupo de Facebook hace unos días), de tal manera que aún no hemos sabido bien cómo reaccionar ante semejante abuso. En todo caso, consideramos que se ha producido una flagrante conculcación del derecho de participación pública y entendemos que habrá que estudiar posibles acciones legales contra los responsables de este despropósito.
Sin duda, como ya apuntan muchas voces, nada será igual después de esta crisis que estamos padeciendo, pero parece claro que hay quienes están aprovechándola a fondo para apuntalar sus privilegios y prebendas y para salir con ventaja cuando regresemos a la vida normal.
En fin, lamentamos tener que ser, una vez más, heraldos de tan negras noticias, pero, ante todo, esperamos y deseamos  de todo corazón que os encontréis todos y todas perfectamente.
Cuidaos mucho y cargad las pilas, que la lucha continúa... y continuará.